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Distancia emocional

La distancia emocional es una de las causas de la separación en las parejas. La mayoría de las parejas inician con un amor idealizado, lleno de detalles, promesas, atenciones, impregnados de un amor incondicional, de una idea de perfección y felicidad eterna; pero, a medida que la relación va avanzando, las etapas de la relación se van dando y ambos se van compenetrando, sumergidos en algunas rutinas, asumiendo responsabilidades, van aflorando conductas y actitudes que generan, en ciertos momentos, un malestar. La persona empieza a ver a su pareja más natural, más humana, más realista. Aflorando incompatibilidades a tal grado que hasta la tapa del inodoro sin bajar, las finanzas desorganizadas, los horarios no establecidos, el deseo sexual no sincronizados, las expectativas no satisfechas, y así, un sin número de detalles que surgen en la convivencia, dan cabida a desacuerdos, discusiones y malestares. Estos detalles no socializados con un nivel de compromiso en pro a la relación laceran el amor y van creando distancia entre la pareja.

La distancia emocional se percibe, se siente, se plasma, cuando se desarrolla esa falta de empatía ante el malestar del otro, generando angustia y ambivalencia.

¿Cómo darse cuenta de que se está incurriendo en un distanciamiento imperante?

• Te sumerges en la carga laboral.
• Disminuye la comunicación entre la pareja.
• Se crea dependencia a las redes sociales.
• Adoptas la posición de entablar temas menos emocionales y hasta irrelevantes.
• Se pierde el interés de compartir con la familia nuclear de la pareja.
• Actitud indiferente ante conflictos.
• Se asume el compromiso de una manera mecánica para evitar que el otro opine.
• Se deja de compartir en pareja.
• Se va perdiendo el deseo sexual.
• Mengua la demostración de afecto, el toque se disminuye, las atenciones y actitudes de servicio.
• La relación se va desgastando y cada uno hace su mundo aparte, sin comunicación, sin planes a corto, mediano y largo plazo.
• Hasta que llega el momento en que se olvida el propósito inicial de la pareja, ya son dos extraños en un mismo espacio, uno junto al otro, sintiéndose solos, sin empatía, ni deseo de estar.

¿Cómo evitar llegar a este punto?

• Estimulando la comunicación asertiva.
• Hablando más de sus emociones que de sus faltas.
• Usando más el YO, que el TÚ.
• Solicitar, en vez de dar un mandato, (me gustaría que me ayudes en… antes que, has esto o aquello).
• Siendo más empático, colocándose en la posición de la pareja.
• Identificando qué te haría más feliz e informarlo amorosamente.
• Identificando como la pareja se siente amada.
• Creando nuevas dinámicas para eliminar la rutina.
• Estimulando la sexualidad.
• Incrementando el trabajo en equipo (cocinar juntos).
• Recordando que los enamoro.
• Ver más las virtudes que los defectos.

La relación de pareja debe ser trabajada por ambos, es como andar en un bote con remos, uno solo no puede remar si quieren llegar a un destino. Una relación compuesta por individuos que trabajan en equipo, por la salud de la relación, es una relación destinada al éxito y la prosperidad.

Lic. Hayny Batista
Psicóloga Clínica, Terapeuta Sexual y de Pareja.